
Esta mañana pensé en tí.
Estaba sentada junto a la ventana y el sol llegaba directo sobre mi vientre descubierto.
Mi piel estaba tibia y se sentía como una caricia.
Me acordé de tus ojos y tus labios, y quise sentir una vez más tu lengua metiéndose en mi ombligo...
...pero después lo pensé mejor.
2 comentarios:
hay pesar y pensares.
saludos doña rijo
PD:espero respuesta de la experimentación 5.0
extreme Lepi
Los micro cuentos son pulentos!!!
Sabías q admiro mucho esta faceta tuya?
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